La Habana, 17 ago.

Inter Press Service en Cuba

– La socióloga, profesora y afrofeminista Rosa Campoalegre, hasta ahora la única cubana parlamentaria del Estado de la Diáspora Africana, reafirma desde esa posición su compromiso con la lucha antirracista y sueña con la creación de una universidad al respecto.

La investigadora del estatal Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas y coordinadora de su Cátedra de Estudios Nelson Mandela explicó a la Redacción IPS Cuba que sus funciones como parlamentaria se enfocan a revitalizar el Estado.

“El Estado de la Diáspora Africana, que se estima en más de 350 millones de habitantes y es considerada el `tercer país´ del mundo, después de China e India, surgió en 2013 y vive una etapa de reanimación desde 2018”, explicó.

Según el primer ministro de este estado miembro de la Unión Africana (UA), el excelentísimo Louis-Georges Tin, “hasta ahora no tenía presencia institucional y era solo una entidad internacional virtual.”

De acuerdo con Campoalegre, “esta elección como parlamentaria la asumo como un reconocimiento a la alta significación de Cuba para África y África para Cuba”.

A su vez, agregó, constituye “un reconocimiento a las agendas regionales que avanzamos en la coordinación del programa académico y el de lucha Más allá del Decenio”, desde el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso), que es una red académica global de entidades públicas y privadas

“Es un alto honor para una mujer negra cubana, un agradecimiento inmenso, pero detrás de ello hay un esfuerzo colectivo y creciente”, destacó, para quien también representa “el compromiso con la lucha antirracista y desarrollar a los pueblos afrodescendientes, mis pueblos”.

Uno de los objetivos que se ha propuesto Campoalegre, es incorporar a más cubanas y cubanos a ese parlamento.

“Es una prioridad, Cuba tiene una experiencia inédita en este campo, vivir aquí es un desafío a las resistencias y a la creación continua, a la solidaridad. Imaginen todo el ingenio, voluntad, humanismo de cubanas y cubanos, fruto de la diáspora africana, aportando a esta causa”, consideró.

En 2014, Mohamed Ould Abdel Aziz, presidente en ejercicio de la Unión Africana apoderó a Louis-Georges Tin, presidente del Consejo Representativo de Asociaciones Negras de Francia, para dar cuerpo a la llamada sexta región y hacer de la diáspora una estructura.

-La Unión Africana reconoció en 2018 a la Diáspora Africana como una entidad que contribuye al desarrollo económico y social del continente.

-El Estado está compuesto por el gobierno del Estado de la Diáspora y el parlamento, que representará a las regiones de la diáspora.

-El parlamento está compuesto por 200 diputadas y diputados de todo el mundo, fundamentalmente de África, las Américas, Europa y Medio Oriente.

 

El nacimiento de la Universidad de la Diáspora

Rosa Campoalegre anda tejiendo ideas y líneas de trabajo para crear y hacer crecer una Universidad de la Diáspora como parte de su labor en el parlamento.

“Hija de la articulación entre las academias negras y otras y el movimiento afrodescendiente a escala mundial, construiremos la Universidad de la Diáspora Africana, en la que ya trabajan parlamentarias y parlamentarios que coordino”, explicó.

Para ella, “será una universidad de intercesiones y diversidades: raza, género/orientación e identidad, territorios, generaciones, credos religiosos y políticos”.

La concibe como “una universidad de la solidaridad, por sus genealogías y estrategia de desarrollo. Tendrá un perfil científico, tecnológico, humanista y sobre todo antirracista, con un eje transversal afianzado en la ancestralidad, la equidad social y la acción política”.

La futura institución se adscribe al paradigma decolonial, antirracista y afrofeminista, que promoverá las afro epistemologías, las pedagogías y narrativas cimarronas, los feminismos negros, los conocimientos y prácticas ancestrales.

“Una universidad abierta, de pleno acceso, pero con prioridad para la diáspora, los liderazgos juveniles y afrofeministas”, anticipó.

Entre sus propósitos, figura erradicar “el genocidio del pensamiento negro y de sus vanguardias, colocar en su lugar la ancestralidad, como ciencia madre, a nuestras bellas y casi olvidadas lenguas originarias y especialmente a desarrollar la identidades y la producción material y espiritual de cara a la lucha antirracista”.

De acuerdo con Campoalegre, combinará becas para jóvenes lideresas afrofeministas y otros liderazgos, con opciones de cofinanciamiento para otros sectores e incluirá programas a ciclo completo desde el pregrado hasta el cuarto nivel de educativo y el posgrado académico.

“Las personas que culminen los diferentes programas podrán desarrollar su actividad profesional en los campos de las diversas ramas de las ciencias sociales, técnicas, humanísticas, de la información, médicas entre otras, así como en los campos del arte, la religión, la política, y los programas de desarrollo económico y social”. (2020)